Magaly Vera
No solo fue vergonzosa la respuesta de Alan Garcia a una actitud de Richard Gálvez, también lo fueron también las palabras de Javier Villa Stein al pretender disculpar la actitud violenta de nuestro presidente, sobretodo por ser el Presidente del Poder Judicial, es decir de aquel que debería decir que todo se resuelve vía legal o por otras vías no contenciosas como la conciliación, pero él indico que no solo fue buena una bofetada, sino que debería de haber sido un puñete. ¿Donde estamos? ¿Aun las ofendas pueden remediarse como antaño: con retar a un duelo?. Estamos en otros tiempos. Sólo en la cultura combi, se señala que si te rayan o te chocan o en fin, eres agraviado, pues haces lo mismo, ahí prima la Ley del Talión, del ojo por ojo y diente por diente. Pero, entendamos que ellos no conocen de derechos ni nada. Y es la opción que eligen ya que la policía según ellos, te hace perder tiempo por el dosaje etílico (que se paga aparte), por el redactar el parte policial, por el perito en fin. No podemos comparar opciones tomadas rápidamente ya que las circunstancias no son las mismas.
No solo fue vergonzosa la respuesta de Alan Garcia a una actitud de Richard Gálvez, también lo fueron también las palabras de Javier Villa Stein al pretender disculpar la actitud violenta de nuestro presidente, sobretodo por ser el Presidente del Poder Judicial, es decir de aquel que debería decir que todo se resuelve vía legal o por otras vías no contenciosas como la conciliación, pero él indico que no solo fue buena una bofetada, sino que debería de haber sido un puñete. ¿Donde estamos? ¿Aun las ofendas pueden remediarse como antaño: con retar a un duelo?. Estamos en otros tiempos. Sólo en la cultura combi, se señala que si te rayan o te chocan o en fin, eres agraviado, pues haces lo mismo, ahí prima la Ley del Talión, del ojo por ojo y diente por diente. Pero, entendamos que ellos no conocen de derechos ni nada. Y es la opción que eligen ya que la policía según ellos, te hace perder tiempo por el dosaje etílico (que se paga aparte), por el redactar el parte policial, por el perito en fin. No podemos comparar opciones tomadas rápidamente ya que las circunstancias no son las mismas.
Para mi, nada justifica la actitud beligerante del presidente García, menos aun al hacerlo delante de su hija, que ejemplo de padre da. Y llamar maricones a los que no actúan violentamente a un insulto tampoco me parece justificable. Ese exabrupto debe de ser enmendado inmediatamente, o siendo Presidente del Poder judicial no confía en la entidad que dirige. Hay muchas formas de reaccionar a un insulto, pero las fomentadas por estos padres de la patria no son las más recomendables.
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